Me fascinan sus sonrisas. Conocer sus historias y escucharlas mientras las observo sonreír. Aunque si he de ser sincera, me cautivan sus miradas y la fortaleza que asoma tras esos párpados que han llorado varios mares y han mirado al calendario con otra conciencia y otra urgencia.
Son mis chicas de la sonrisa, mis chicas de la valentía y las guerreras del cáncer, cuando el cáncer tan solo fue el detonador para un nuevo despertar a una nueva identidad, y es que no hay situación que no pueda servirnos para reiniciarnos, tengamos 20, 30 o 60.
En los muros del tiempo trabajamos todos como arquitectos de nuestro propio destino.
Dr. Orison Swett Marden
Itxaso y Rakel ♡
Caprichoso el destino, que ahí estabas tú sosteniendo la vida de tu pequeña hermana recién nacida. Tú que ni siquiera eras capaz de imaginar que un día vivirías en Nueva York, amarías intensamente, te desgarrarías por dentro y acabarías en los brazos de esa pequeña, que sostendría a la inversa tus pocos días de vida, tu cuenta atrás hacia el infinito.
¿Puedes creerlo? ¿Puedes siquiera imaginar la cantidad de vida que encierran estas dos imágenes? A veces siento que naciste para poder enseñar todo lo que este cáncer vino a mostraros sobre cada una de vosotras, sobre los lazos familiares, sobre las creencias y sobre la capacidad de salir adelante a pesar de todo, o mejor dicho, con todo. Acumulando experiencias y cribando las necesarias para que uno se levante de la cama con las ganas suficientes como para intentar hacer de este mundo un lugar mejor. Sin culpables, ni quejas, ni lamentos que te atan al fuego que arde y consume, en vez de al oxígeno que respiras y da vida. Seguir viva.
—Me han hecho «un Angelina» —me dijo Itxaso. — Lo que viene a ser un mastectomía de prevención.
No recuerdo exactamente qué fue primero, si las imágenes tomadas por Itziar Villar que tanto me impactaron, leer los textos tan hermosos como crudos y precisos que escribía Itxaso o, sencillamente, perderme en la mirada de esta mujer que apenas comenzaba a escalar su Everest personal. Una auténtica transformación. Una mochila que aprender a portar sin dolor ni miedo, una reconstrucción tanto física como anímica y espiritual, para encontrar respuestas a preguntas como ¿quién soy? ¿Qué ha pasado aquí? ¿Y ahora qué?
Ya el futuro si eso… lo decidimos cuando llegue. ♡
¡Brava! ¡Bellezón! Tan inspiradora y creadora…
Carla y Alejandra ♡
Creo que no fue casual conocer a Carla. Que la conocí para descubrirla y acompañarla en la distancia en cada nuevo amanecer. Que se cruzó en mi vida para regalarme palabras que sumaran junto a otras historias. Que llegó a mí para que yo por fin diera forma a tantísimas ideas escribiendo este relato.
Mis chicas valientes, Carla y Alejandra, ejemplares en su actitud y su verdad. Esto llega, esto duele, esto muerde. Esto mata, pero no podrá con nosotras. Y aquí estamos y así luchamos y así mostramos los estragos de la quimio, de las operaciones que resultan más complejas de lo que a priori te cuentan, y el cansancio, y el miedo y el abismo…
Y tú que eres tan joven te cuestionas tantas cosas… Y muchas de ellas las callas incluso para ti misma porque temes verbalizar lo que te provocan las posibles respuestas o los hipotéticos silencios. Y tu cabeza da vueltas y tú giras con ella y a días te pierdes y otros te encuentras más lúcida que nunca y la fuerza se te escapa por los poros y te comes el mundo y sabes que te lo mereces, que tu parte de sufrimiento ya la has cubierto y ahora toca el lado bueno de las cosas, porque lo tiene…
Y ahí estáis, mujeres sonrisa, siendo el soporte y la compañera de cada miembro del clan enganchado a este patrón.
No es lo mismo vivir una enfermedad desde la ceguera del espíritu que desde la luz.
Y las dos sois tan luz…
Ayuda conocer a mujeres que viven su vulnerabilidad con naturalidad.
Ayuda leeros, escucharos, observaros.
A través de una enfermedad se puede aprender a sentir gratitud, porque la crisis personal a la que te enfrenta no se daría si no atravesaras ese desierto y pisaras ese fango. No conocerías tus propios límites si no te asomaras a ese precipicio. No lograrías jamás vislumbrar tu fuerza si el coraje no se hiciera necesario para sobrevivir a la inquietud que causa la incertidumbre.
Canela fina, Carla. Canela fina, Alejandra. Sois tan bonitas…
Únicamente queda vencido quien capitula con la adversidad.
Dr. Orison Swett Marden
Jose ♡
Y de repente en una revisión rutinaria aparece. Y te turba, pero no te tumba, porque tú eres pura actitud, puro carisma y pura fuerza. Siempre lo has sido.
¿Será genético? No hablo del cáncer; me refiero a tu espíritu, a la fortaleza de tu carácter, a tu inquebrantable alegría de vivir, porque desde que tengo uso de razón siempre te he visto sonreír y reír. (Que no es lo mismo.)
Sonreír puede sonreír todo el mundo, pero reír es sinónimo de disfrutar y esas ganas, ni la mastectomía te las ha quitado, ni la quimioterapia y tu cabeza de pelona, ni ese cansancio tan hondo que llega después de cada sesión.
Ojalá toda aquella persona que padezca esta enfermedad repita, con el brillo que tú tienes en la mirada, «estoy estupenda», porque las palabras también pueden curarnos y en ocasiones lo olvidamos. Nos agarramos fuerte a un diagnóstico, delegamos toda responsabilidad y consecuencias y hasta efectos secundarios en el médico de turno y nos olvidamos que hay una parte de todo este viaje de transformación al que te somete cualquier enfermedad, que tiene que ver con uno mismo y su enfoque.
¿Y si la enfermedad llega para que tomemos conciencia y reajustemos el rumbo que llevamos?
Tus fuerzas naturales, las que están dentro de ti, serán las que curarán tus enfermedades.
Hipócrates ( Siglo V a.C.)
La vida mata
Tal cual. No es una enfermedad que te diagnostican, no es fruto de la mala suerte, no es nada más que la realidad. Vivir va estrechamente ligado a morir. No te matan; mueres. Y ya está.
Sin embargo, hasta para asumir esta certeza necesitamos buscar culpables. Una vez los identificamos, podemos cobijarnos en el modo víctima y ceder el control de nuestro estado a quien sea que tome el volante por nosotros.
¿Pensar? ¿Viajar hacia las entrañas de uno mismo y asomarse a las sombras? Es demasiado doloroso. Así que, inconscientemente, optamos por soportar el dolor físico, que es más llevadero. ¡Tela!
Si confiáramos en que tras la catarsis renaceremos convertidos en livianas mariposas… 🦋🦋🦋
Si cada enfermo pudiera tener a su lado además de unos buenos médicos a unos buenos especialistas en psicología e incluso reeducación emocional, otro gallo cantaría. Porque, ¿en qué se diferencian unos enfermos de otros? En la actitud, en la escucha interna, en la coherencia y en la responsabilidad. Acción y movimiento.
Partiendo de la base de que todos llegamos a este mundo con fecha de caducidad, la forma en la que atravesamos los días es la que marca el ritmo y la calidad del trayecto. No es lo mismo ser valiente y asumir responsabilidades y cambiar rutinas si es necesario a fin de mejorar, que mantenerse inerte quejándose de tu mala suerte y además, arrastrando a los de alrededor contigo.
Hay quienes plantan cara a la muerte viviendo, que es lo que toca, y hay quienes se plantan ante la vida, muriendo cada día un poco. ♡
¡Ojo! No digo que sea sencillo. Digo que cuando el «plan A» no ha funcionado, lo sensato es intentar un «plan B» vital. Reiniciar. Romperse en pedazos para renacer mejor.
¿Tú a qué grupo perteneces?
No es solo cáncer, es energía.
Es muchísimo más. Creo que ni siquiera llegamos a imaginar todo lo que supone hasta que no lo vivimos dentro o de cerca. Existe la conciencia colectiva que adjudica una determinada fuerza emocional a las palabras y las contamina con su vibración.
Las palabras nos mueven por dentro. Nos agitan. Tanto la palabra escrita como la escuchada. Son vibración, no se salva ni una. No nos salvamos ninguno de nosotros. Porque todo es vibración. Somos vibración. Entonces, ¿qué nos hace vibrar? ¿Cómo vibramos? ¿En qué frecuencia?
Obvio, no es lo mismo que te diagnostiquen equis que ye. ¡Menuda carga emocional te cae encima depende lo que te digan! Pero tú siempre puedes intentar protegerte de esa carga y reeducar tu diccionario.
¿Ascender a una montaña de 1000 metros o escalar el Annapurna? Cada situación requiere un planteamiento distinto y acorde al reto. Armonizar cuerpo y mente tiene que ver con la fuerza de voluntad y la toma de conciencia. Resintonizar la vibración general, aprender a hacerlo o directamente, descubrir cuál es la nuestra.
¿Conocéis a Masaru Emoto?
No os comparto estas referencias para que me creáis, sino para que lo valoréis y penséis en ello. ♡
Para que abráis los ojos ante lo que os sucede y sucede alrededor. Para que veáis más allá de etiquetas y diagnósticos, para que abracéis los cambios y a los valientes que luchan por salir adelante con conciencia.
Para que midáis el alcance de vuestras palabras que, aunque lleven buena voluntad, pueden desencadenar un tsunami.
Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio.
Proverbio hindú
Mis chicas de la vida
El coraje comienza con aparecer y dejarnos ver.
Brené Brown
Tus actuales circunstancias no determinan dónde puedes ir; se limitan a determinar por dónde empezar.
Nido Quien
Al final no son los años en tu vida lo que cuentan, sino la vida en tus años.
Abraham Lincoln
Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo
Parafraseo a Gandhi. «Sé el cambio que quieres ver en el mundo». No solo en el plano laboral, no solo como sociedad, sino como individuo, conviértete y sé ejemplo para los que vienen detrás.
¿Te inspiran estas tres mujeres? A mí sí, muchísimo. Me demuestran a diario que las ganas pueden más que las excusas y que el miedo a lo desconocido. Me reafirman en que la auténtica valentía está en mostrar tu vulnerabilidad y abrazarla. Me enternecen, me hacen sonreír y me hacen tomar perspectiva sobre mí misma, animándome a alejar el foco de mi ombligo y mirar más allá. Todo llega y todo pasa.Lo que marca tu destino es tu carácter, no la buena o mala suerte. Lo que eres capaz de hacer con lo que tienes desde donde estás.
Jose está siendo un ejemplo brutal para su entorno y para todos aquellos que la conocemos bien. Carla, compartiendo su proceso y sus pensamientos, ayuda a cientos de personitas a sentirse más fuertes y a conectarse consigo mismas e Itxaso imparte talleres y charlas sobre transgeneracional, además de cursos de escritura terapéutica y terapia narrativa. También es la creadora de un entrañable personaje: «La muñeca Bracky».
Y yo…
Yo solo soy la contadora de historias que necesitaba dar visibilidad a personajes de carne y hueso como estos. No se trata solo de ponernos el lazo rosa en fechas señaladas, hacer una donación o correr una carrera a favor de la lucha contra el cáncer. Se trata también de cuidar, de observar y acompañar desde la conciencia, de ser y ofrecer nuestro espejo a quienes se encuentran en situaciones complicadas y de tender la mano en el día a día. De inspirar y de permitir que nos inspiren, de sumar.
Necesitaba escribir sobre la gratitud que siento por haberme cruzado en esta vida con mujeres que sí son ejemplares y que día a día me aportan mucho. Quería traerlas a mi pisito blog y permitirles que descansen conmigo y que sean reconocidas como las heroínas que son, las que no se rinden.
Gracias de todo corazón a las tres por confiarme vuestras historias y vuestras imágenes para esta entrada. Por permitir que os escriba y que os presente a mi mundo. Os adoro.
Espero que entre todas, poco a poco, consigamos ayudar a otras muchas a levantar la mirada y el corazón a la Vida, con la sonrisa puesta. ♡
Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo.
Eduardo Galeano
Lo importante nunca son las circunstancias, sino tu Luz interior.
Y para terminar, ¿cómo no? Mi querida Rozalén con un tema precioso que escribió para Cadena Cien. «Vivir».
Besos a todos.
✍🏼💗