“La mayoría de la gente realmente no quiere libertad, porque la libertad implica responsabilidad, y la mayoría de la gente tiene miedo a la responsabilidad”.
(George Orwell)
Relaciones: consumo responsable
Responsabilidad, ilusiones y libertades. Podrían darse la mano. Uno tiene que ser responsable de mantener vivas sus ilusiones, LIBREMENTE, porque si no se siente feliz en su día a día… ¿para qué vivir? o ¿cómo?
Es increíble la cantidad de gente que se lamenta a diario de que las cosas no van como le gustaría, o peor aún, que pelea por las cadenas que aten corazones que, por error o egoísmo, creyeron que les pertenecían. Y es que cada día me sorprendo más de lo confundida que está la gente con respecto al Amor, y a lo que significa “respetarte y amarte hasta que la muerte nos separe”.
Respeto es ser sincero con el otro y decirle que lo amas, pero también lo es decirle que ya no. Respeto es intentar hacer las cosas bien, sin dañar, cuando sin querer dañamos de por sí. Respeto es valorar que se ha intentado, honrar lo vivido y soltar lo asido, porque solo nos pertenecen nuestros pasos, nuestras ilusiones y nuestra libertad para ir abriendo caminos que nos hagan sentir bien cada día. No significa rendirse cuando las cosas no van bien, ni mucho menos. Existe realmente ese punto de inflexión a partir del cual uno sabe que ya no hay vuelta atrás, que por mucho que lo intentemos, no funcionará. Porque no somos quienes fuimos, ni quienes éramos, ni somos quienes seremos. El mismo día a día que queremos atar a una rutina nos va cambiando.
A veces la gente no quiere escuchar la verdad, porque no quiere que sus ilusiones se vean destruidas.
Nietzche
No soy responsable de tu felicidad
Creo que no hay sensación más asfixiante que la de sentir la responsabilidad sobre la felicidad ajena. Que otros esperen que cubramos sus expectativas y los nutramos porque adquirimos un compromiso. Hay votos que parecen tan sumamente condenadas de antemano… Como creer que todo es “para siempre”. Ojalá. Ojalá lo fuera y ojalá funcionara. Pero es que esperando ese final feliz van pasando los días y muchas veces nos hemos desinflado, o hemos despertado y hemos visto en perspectiva donde estamos y ¡oh! ya no es como era ayer, ni se parece siquiera un poco a lo que nos hacía ilusión.
El día a día nos hace madurar. Lo que sucede en el mundo nos afecta, la gente con la que compartimos las horas nos toca. Cambiamos de pensamientos y también de sentimientos, y cambiar no significa ir a peor, sino evolucionar. Y es necesaria mucha madurez emocional para aceptar que la evolución de quienes amamos, a veces, los aleja de nosotros.
♡
Hay una frase de Voltaire que siempre me deja clavada en el suelo. Dijo: “no estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé con mi vida tu derecho a expresarlo”. Creo que eso es Amor. Eso es “respetarte y amarte todos los días de mi vida”. Que, aunque no me sostengan ni me sujeten tus nuevos pasos, te daré tu legítimo derecho a continuar en la búsqueda de la felicidad, aunque no sea conmigo.
Pd: este texto está dedicado a todas esas personas que luchan cada día por su felicidad, aún a riesgo de no ser comprendidos por muchos.
Creo que solo podemos ayudar haciendo visible lo invisible.
Besos mil y abrazos. Muchos, que siempre hacen falta. Si quieres escucharlo, aquí tienes el audio.
Las imágenes que acompañan al post son de Paul Bond, estoy enamorada de su arte.
Ah! Bunbury cantaba esto, tomad nota. Temazo: Aunque no sea conmigo
«A placer, puedes tomarte el tiempo necesario
que por mi parte yo estaré esperando
el día en que te decidas a volver y ser feliz como antes fuimos.
Sé muy bien que como yo estarás sufriendo a diario
la soledad de dos amantes que al dejarse
están luchando cada quien por no encontrarse.
Y no es por eso que haya dejado de quererte un solo día,
estoy contigo aunque estés lejos de mi vida por tu felicidad a costa de la mía.
Pero si ahora tienes tan solo la mitad del gran amor
que aún te tengo puedes jurar que al que te tiene lo bendigo.
Quiero que seas feliz, aunque no sea conmigo.
Enrique Bunbury.
Si este texto te ha removido, te leo. ♡
Itziar
Ana
Es maravilloso!! Eso es Amor real, el deseo de que todos los seres sean felices.Y, estamos tan lejos la mayoría…!!
Normalmente a lo que llamamos amor es apego, queremos hacerlo nuestro porque lo amamos,nos decimos,lo amarramos para que no me deje no se vaya con otr@.
Es muy triste una relación así y no ayuda a nadie.
Sin embargo el Amor de verdad da cabida a todos los seres abraza , acoge y comparte porque no excluye .
Necesitamos de los demás, estamos interrelacionados y podemos transformar el apego en Amor.
Itziar Sistiaga
Muchas gracias, Ana.
Tengo un cariño especial a este texto.
Gracias por tu comentario. Ay, el apego…