Anoche volví a escuchar Cornerstone de los @artikmonkeys. Una canción prohibida para mi salud emocional, y que de hecho, hasta ayer, ni siquiera recordaba.
Pero los recuerdos son así de impertinentes a veces, y asoman cuando menos los esperas.
Esta canción me lleva a uno de los peores días de mi vida, a mi época más triste, cuando era una sombra de mí misma, enferma y asustada porque no veía salida tras un cúmulo de errores en cadena.
Lo que son las cosas; aquella escena, con la música sonando de fondo, se convirtió en una de las ideas principales para escribir El Veto. Y hasta ayer no me di cuenta de lo necesario que fue en mi vida transitar aquel naufragio.
🔺Porque renací.
Renací rompiendo moldes, reglas y creencias.
Renací poniendo límites, fijando metas y superando pruebas.
Renací sonriendo… y por ello reviví.
🙏 Porque la vida necesita alegrías, planes, proyectos, giros y rumbos distintos. Reinvenciones, caídas, curas, recuperaciones y, también, ACEPTACIÓN. Sin este paso no hay serenidad ni alegría que se mantenga. Un paso interesante por el camino de la coherencia entre el
✨SER + SENTIR + PENSAR + ACTUAR + DECIR ✨
Soy extriste, pero eso no quita para que a días me bañe en las lágrimas de mi tristeza. Soy extriste porque ya no la habito, solo la visito.
Soy extriste porque encontré mi propósito y mi propio modus operandi, donde no necesito encajar, ni imitar, ni compararme con nadie, porque al fin me gusta quien soy, cómo funciono y a dónde voy.
También admiro de dónde vengo y en cómo lo he conseguido desde el pacifismo, la empatía y la compasión.
Os deseo mucho de lo mismo que siento por mí misma. Y quiero dejar por escrito también que de todo se sale, aunque la salida implique dejar de escuchar determinadas canciones.
Besos llenos de buenrollismo, gente bella.
¿Me contáis cositas y os leo?
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